jueves, 2 de mayo de 2019


EL PARÁSITO MÁS RESISTENTE:
1.1.       Descartes comienza su formación académica y comienza a preguntarse qué es y el por qué de las cosas, al igual que lo hace un niño cuando tiene el primer contacto con el mundo. Es entonces cuando la curiosidad pregunta y nos dan la respuesta más fácil: la opinión. Esa entorno a la que gira nuestras vidas, desde que nacemos hasta que morimos, quedando la capacidad más desarrollada del ser humano ( el pensar) en un segundo plano.
Nos dan todo hecho,  desde la comida precalentada hasta las ideas bien mascadas y esto último es lo que se suele aplicar como método de enseñanza. Entrar a clase, escuchar la explicación correspondiente de lo que se está dando y al llegar a casa memorizar cual papagayo lo ´´aprendido´´, cuando verdaderamente no tenemos ni puñetera idea de nada. Pero es así como sigue funcionando ya que es lo más cómodo, lo más rápido, lo más simple. Eso le pasaría a Descartes, que haciendo uso de la razón quiso discernir entre lo verdadero y lo falso, entre la opinión y la ciencia. Su gran formación académica no hizo mas que sobrealimentar las opiniones y su curiosidad hizo que dudara de todo cuanto había estudiado, con la certeza de que su ignorancia ahora era aun mayor.
Ahora bien, Cobb dice que una vez una idea ha sido formada se queda ahí, siendo casi imposible su erradicación. Solo tenemos que aplicar esto a nuestras vidas, al sistema educativo por ejemplo: te enseñan algo diciendo que así es y lo seguirá siendo, sin tan siquiera darte la opción de que te preguntes qué es. Por lo que la idea mascada que te dan se acomoda en tu cerebro y no vuelve a pasar como objeto de sugestión, ya que es evidente porque así te lo han enseñado. Algunos, como Descartes (mediante el pensar) consiguen esta erradicación y es entonces cuando lo evidente se hace cuestionable y la ignorancia aumenta.

Me recuerda a Sócrates debido a que este se preguntaba el qué es de todo, teniendo claro que él solo sabía que no sabía nada.


2.2.       Cuando los estractores no son capaces de discernir si se encuentran en la realidad (mundo cotidiano) o en la imaginación del subconsciente recurren a un objeto llamado tótem, al que se aferran y con el que disipan sus dudas de si se encuentran despiertos o soñando. Descartes para llegar al conocimiento dudaba de todo y es por ello que recurría a su primer principio: ´´pienso, luego existo´´, con el que disipaba la duda de su existencia.


3.   3.  La hipótesis del genio maligno  no hace otra cosa que hacernos dudar de todo, incluso de las propias matemáticas como lo hizo el propio Descartes. Él lo hace ver como un dios que nos crea para que estemos naturalmente inclinados a lo que no es verdad y sea así como desarrollemos nuestras vidas, creyendo que todo lo que damos por evidente es lo real. Por lo tanto esto es la forma más radical con la que Descartes nos hace dudar de todo, ya que lo que creemos ha sido implantado por un genio maligno que no quiere que encontremos la verdad y por ello nos dejamos llevar por los sentidos.


4.4.       Un filósofo anterior a Descartes que atribuyó un carácter divino a la razón fue Platón, que mediante su teoría de las ideas separó el cuerpo, el cual se deja llevar por los engaños de los sentidos y vive en la opinión y el alma, capaz de discernir la realidad, de llegar al conocimiento. Esta es eterna y tiene un carácter divino, ya que asociado a la razón va ella.
Platón, cuando nos invitaba a vivir esta vida de razón no quería otra cosa mas que la de que usáramos nuestra capacidad por excelencia como seres humanos: que pensáramos, que hiciésemos uso de la razón, que llegásemos al conocimiento, a la verdad y con ello al Bien.
Que no nos dejásemos influir y persuadir por los engaños, las apariencias y la falsedad que se incrustan en nuestras cabezas como un virus y no hay forma de erradicarlo mas que con el uso de la razón.

5.    5.   No es posible la realización efectiva del ideal ilustrado mas que nada porque no se nos podría controlar, ya que seríamos libres. Y es devastador el número de personas que optan por la vía fácil de la opinión, alimentando este engaño y estableciendo mas muros y límites tanto a ellos mismos como a los demás, pero es así como lo eligen y encarrilan sus vidas y tristemente la de los demás también. Eso es lo que interesa, una minoría en el poder, presos de sus propias cárceles y arrastrando con ellos a la sociedad. Por eso jamás va a existir el ideal ilustrado, supondría que todos los seres humanos se deshicieran de lo material, de lo impuesto durante toda la historia, de las opiniones… pero eso no interesa, ya que no es nada fácil hacerlo. Al contrario, pensar es lo que más cuesta y por ello nos dejamos llevar como ovejas de rebaño, sin pararnos ni un minuto a divagar por las evidencias de nuestra mente, sin cuestionar lo dado y sin saber que al mirar alrededor hay más campo, hay libertad. En eso se basa el control de nuestra sociedad, ya que piensan que sino sería un caos y no hay mayor caos que el de creer ser libre encerrado en ti mismo.
Una sociedad así sería imposible, simplemente por el hecho de que no queremos pensar.


6.  6.     Para nada están hablando del mismo yo. Estoy más de acuerdo y valoro el yo de Descartes, ya que el de Kundera habla de un yo encontrado en el mundo físico, dejándose llevar por el dolor y sufrimiento que no son otra cosa mas que sentidos y por ende se encuentran en el mundo de las apariencias. El yo de Descartes hace referencia a la razón (que para el autor tiene algo de divino), el uso de ella y el pensar para llegar a la veracidad de las ideas.
Obviamente un filósofo valoraría más el yo de Descartes, ya que el otro no es más que otro reflejo de la realidad, otro engaño que no nos permite discernir y llegar al conocimiento. Es el yo contra el que luchan los filósofos, contra el cual dedican sus vidas a enseñarnos para  abrirnos el campo de visión y hacernos pensar, hacernos libres mediante nuestra razón.

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